Enero 8 (1959) Castro entra en La Habana.

Por Gustavo Silva.

Aldo Vera, jefe provisional de la policía en La Habana, informa este día que hay 800 personas detenidas, entre acusados y sospechosos, desde altos oficiales del batistato hasta chivatos a sueldo. La Caravana de la Libertad llegaba al Cotorro, donde Castro se encuentra con su hijo, a quien habían encajado uniforme verde olivo. Viajan en auto hasta la Virgen del Camino y de ahí en jeep. La columna avanzó por la Avenida del Puerto e hizo escalas en el embarcadero frente al Estado Mayor de la Marina, donde habían fondeado ex profeso al yate Granma, y en el Palacio Presidencial. Aquí el presidente Urrutia salió a la terraza norte y presentó a Castro: "Después de derrocar la dictadura con su esfuerzo admirable no ha tomado el poder en sus manos…" Nadie previno que sabría arreglárselas para ejercer el poder dictatorial aun sin atributo formal de mando. Allí mismo Castro dijo: "Este edificio nunca me gustó (…) yo quiero que el pueblo vaya a Columbia". Nadie advirtió que la nueva república se fundaría como campamento.

Castro hizo alarde de "que conozco al pueblo" pidiendo a la multitud abrir una fila para atravesarla solo junto con el presidente Urrutia. Así fue, y la columna enrumbó por Malecón hasta 23, pasó por delante del Habana Hilton y siguió hasta Columbia. Aquí Castro pronunció el discurso que, tras la pregunta retórica de ¿Armas para qué?, trazó el primer rasgo del Estado totalitario por venir: el monopolio de las armas, que "deben estar en los cuarteles". Hoy ni siquiera los soldados tienen acceso legal a un arma de fuego cargada fuera del servicio de guardia y las prácticas de tiro.

De Columbia Castro se escurrió a un hotel de la calle Monserrate, que conocía de sus tiempos de estudiante universitario. Luego se instalaría en el Habana Hilton.

-Nota: Al día siguiente de irrumpir Castro en La Habana fueron asignadas las carteras ministeriales de Comunicaciones [Enrique Oltuski] y Ponencia y Estudio de las Leyes Revolucionarias [Osvaldo Dorticós]. El ministro de Gobernación, Luis Orlando Rodríguez, fue interino de la Defensa Nacional hasta que el comandante Augusto Martínez juró el cargo (enero 20, 1959) por designación de Urrutia, quien nombró también al doctor Regino Boti ministro encargado del Consejo Nacional de Economía. Al llenarse (enero 23, 1959) la vacante del Ministerio de Bienestar Social [Elena Mederos], el gobierno provisional quedó definitivamente integrado y Castro voló ese mismo día a Caracas para celebrar el primer aniversario de la caída del dictador venezolano Marcos Pérez Jiménez.