El presidente cubano, Raúl Castro, pidió a sus ministros que sean más exigentes en todas las áreas para frenar la desorganización y el descontrol y evitar cometer los mismos errores del pasado, al tiempo que exhortó a continuar trabajando en la implementación de las reformas económicas y sociales aprobadas el pasado abril.
Estamos obligados a incrementar la exigencia en todas las áreas y sectores, para cortar de raíz la desorganización y el descontrol que en muchos lugares se han instaurado, dijo Castro durante un Consejo de Ministros celebrado el pasado fin de semana, según informa este viernes el diario oficial cubano 'Granma'.
Hay que pensar, analizar, valorar todas y cada una de las posibilidades, para luego poder tomar la mejor decisión sobre cualquier asunto. Si no lo hacemos así, corremos el riesgo de cometer una y otra vez los mismos errores, enfatizó el mandatario.
En el encuentro los ministros debatieron el paquete de más de 300 reformas que aprobó el pasado mes de abril el gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC), explicó el rotativo en una edición anterior en la que anunciaba que los detalles de esta reunión serían dados a conocer progresivamente.
Los ministros también insistieron en la necesidad de continuar reduciendo los gastos, incrementar la producción de alimentos, aumentar las exportaciones y revisar las importaciones, así como seguir dando prioridad a las inversiones que se recuperan con sus rendimientos y aportan ingresos al país a medio plazo.
Nuevas medidas.
Este viernes los cubanos pudieron conocer el procedimiento de la compraventa de coches y viviendas, un hecho inédito en la isla y una de las medidas más esperadas desde que comenzaron a aplicarse las reformas hace un par de años.
Los cubanos y extranjeros residentes en la isla podrán a partir de ahora comprar, vender, traspasar, donar y adjudicar los inmuebles que han habitado y sobre los cuales no tenían estos derechos. El Gobierno flexibilizó además los trámites para realizar acciones constructivas en las viviendas de la población, explica 'Granma'.
Una de las principales novedades es que los cubanos que abandonen la isla de forma definitiva podrán traspasar sus viviendas a los cónyuges, excónyuges y familiares hasta el cuarto grado de consanguinidad siempre que hayan convivido permanentemente con el propietario durante cinco años.
En estos casos, se reconocerá el derecho a la propiedad de la vivienda sin que medie pago, aunque los nuevos propietarios estarán obligados a liquidar los adeudos que pudieran quedar pendientes con el banco e igualmente tendrán que abonar el Impuesto sobre Transmisión de Bienes y Herencias, destaca el rotativo.
La nueva norma elimina también la prohibición que existía en Cuba de comprar o vender coches de fabricación posterior a 1959 y permite además adquirir más de un vehículo sin importar su año de fabricación.
Asimismo, se suprime la restricción de que las personas naturales que recibieran autorización para comprar un vehículo y fueran propietarias de otro debían traspasar este último al Estado o darlo de baja.
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