Las largas filas de autos para comprar combustible en servicentros y gasolineras de La Habana y otras provincias ha generado una situación crítica en Cuba.
Aunque no es la primera vez que la isla atraviesa una crisis en el abastecimiento de combustible, no se recuerdan en los últimos años tantas colas para acceder al diésel y la gasolina.
La situación genera malestar entre los choferes. Por consiguiente, favorece la ocurrencia de discusiones y pleitos en las gasolineras, donde no pocos intentan “colarse” para evitar las colas, que en muchos casos llegan a ser de varias cuadras.
Si bien no todos los conductores se lo toman de la misma forma, el consenso es que la crisis de combustible en Cuba está golpeando con fuerza tanto a particulares como a estatales.
“Me ha golpeado (la crisis), pero hay que seguir luchando. Yo vengo ahora de la Víbora, he pasado por tres Cupet hacia acá y todavía la cola sigue andando”, comentó a CubaNet un chofer que esperaba su turno en una gasolinera de La Habana.
Otros, en cambio, confían en que se trata de una situación pasajera que no debe dilatarse en el tiempo.
“Pese a todas la necesidades que hay, vamos a salir palante, esto va a mejorar”, aseguró otro conductor.
Este jueves CubaNet reportó sobre una cola de casi tres kilómetros en una carretera de la localidad habanera del Wajay, reparto ubicado en el municipio de Boyeros.
Decenas de choferes en sus vehículos permanecían aparcados en la carretera mientras esperaban su turno para comprar combustible en el Oro Negro de la zona, único servicentro con gasolina en todo el municipio.
Algo similar ocurrió el pasado miércoles, cuando se formó otra extensa fila en pleno malecón de La Habana para comprar combustible en el servicentro de Galerías Paseo.
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