Por Rosario Hiriart.
-Alguna vez he leído y yo misma repetí, “que Lydia Cabrera descubrió a Cuba a orillas del Sena…”
-Sí, es cierto, confieso que mi país me empezó a interesar en Francia, creo que eso puede sucederle a todo el que se aleja de su tierra natal; lo he observado antes en los cubanos que vivían en París, no tanto en los que venían a educarse en los Estados Unidos, y se explica.
-Durante los años que usted vivió en París estudió las culturas y religiones orientales (la India, el Japón, el budismo…), ¿fueron esos estudios los que le llevaron a acercarse a “lo negro”?
-De aquí fue que nació mi interés por la cultura negra.
-Alguna vez he leído y yo misma repetí, “que Lydia Cabrera descubrió a Cuba a orillas del Sena…”
-Sí, es cierto, confieso que mi país me empezó a interesar en Francia, creo que eso puede sucederle a todo el que se aleja de su tierra natal; lo he observado antes en los cubanos que vivían en París, no tanto en los que venían a educarse en los Estados Unidos, y se explica.
-Durante los años que usted vivió en París estudió las culturas y religiones orientales (la India, el Japón, el budismo…), ¿fueron esos estudios los que le llevaron a acercarse a “lo negro”?
-De aquí fue que nació mi interés por la cultura negra.