El Ayuntamiento financia con 76.624 euros a dos instituciones del régimen castrista. El apoyo del Ayuntamiento al Gobierno cubano no se ha limitado a la inyección financiera, sino que se ha ampliado al intercambio de visitas de autoridades y de técnicos con cargos intermedios. La presencia del entonces jefe de la diplomacia castrista, Felipe Pérez Roque, en Córdoba en octubre de 2008 y su encuentro oficial con Rosa Aguilar, aún alcaldesa en ese tiempo, no fue casual.
Se trataba, en cierto modo, de la culminación de un año intenso en las relaciones bilaterales Córdoba-Cuba. No es ninguna exageración, puesto que en ese año se produjeron hasta cuatro visitas de personal del Ayuntamiento a la isla caribeña, todas, lógicamente, a cargo de las arcas municipales.
Uno de los viajes estuvo integrado por la concejal delegada de Igualdad y Cooperación, Marián Ruiz, y por la jefa del Departamento de Cooperación y Solidaridad. La estancia en la isla tuvo dos escalas: la primera fue La Habana, y la segunda Pinar del Río, una región al oeste de Cuba en la que se celebraba en ese momento el primer encuentro de cooperación andaluza. En ese enclave hay varios proyectos financiados por el Consistorio, como el que desarrolla CIC-Batá.
Tres personas más vinculadas con el Consistorio han estado en 2008 en la isla caribeña a cuenta del presupuesto local.
Dos de ellas pertenecen a la empresa pública Saneamientos de Córdoba (Sadeco): el jefe del complejo medioambiental de la entidad, y un técnico de la empresa. La restante fue un cooperante que viajó a La Habana Vieja para «fortalecer los lazos entre las dos ciudades».
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