viernes, 27 de agosto de 2010

Cuba desestima interrogatorio a Max Marambio en Chile.

Por David Muñoz.

Un nuevo oficio cubano llegó ayer hasta la Fiscalía de Chile. Esta vez, para dejar sin efecto el requerimiento enviado en julio pasado que pretendía obligar al empresario chileno Max Marambio a responder un cuestionario con 21 preguntas ante el Ministerio Público.
Las autoridades de la isla desestimaron que el ex jefe político de la candidatura presidencial de Marco Enríquez-Ominami entregue en nuestro país su versión sobre la investigación en su contra por presuntas irregularidades cometidas en la administración de su empresa de alimentos Río Zaza.

Cuba argumentó que los antecedentes recabados por la indagatoria de ese país son suficientes para sustentar las imputaciones por los presuntos delitos de cohecho, estafa, malversación y falsificación.

El Ministerio Público había rechazado dar curso a este primer exhorto, por considerar que no entregaba antecedentes concretos sobre los hechos en que se vincula al empresario.

De hecho, posteriormente se envió a través de la Cancillería un oficio solicitando mayor información. Las preguntas abordaban genéricamente temas relativos a los movimientos financieros y comerciales de Río Zaza, así como el traslado de dineros y bienes desde Cuba a Chile por parte de Marambio.

También le consultaban por su relación con el ex ministro de la Industria Alimentaria, Alejandro Roca Iglesias, quien se encuentra detenido en la isla hace cinco meses.

En el entorno del empresario creen que Cuba no insistió en el requerimiento debido a que la fiscalía chilena apeló al principio de reciprocidad entre los Estados.

En tanto, su abogado, Eduardo Contreras, lamentó ayer la decisión de no cursar el exhorto.

"Era una ocasión importante para poner sus puntos de vista, dado que no ha sido escuchado, un principio fundamental, pues nadie puede ser juzgado sin ser escuchado", señaló.
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Noticias de Macondo.

Fragmento de un email enviado a un amigo desde Camaguey.

"Ahora son los frijoles los que están perdidos en moneda nacional, solo aparecen unos paqueticos que ni una libra creo que hacen a 1.45 cuc. De los jabones de baño ni hablar. El chisme del momento es la cantidad de gente presa que hay por dietas falsas para enfermos de SIDA (más de 200), hay gente de varios niveles, incluyendo dependientes y personajes de Salud Pública.

Por otra parte unos médicos 'perdieron' los cuños y ahora aparecieron dietas de embarazadas falsas también, y viejas de más de 60 años comprando canastillas para revender; pero lo interesante es que esas dietas son firmadas por los directores de los policlínicos."
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jueves, 26 de agosto de 2010

Al agente 007 se le acaba el plazo.

Por Laritza Diversent.

El empresario chileno, Joel Max Marambio Rodríguez, tiene plazo, hasta este 23 de agosto, para presentarse ante el Instructor del Ministerio del Interior (MININT), Teniente Coronel Francisco Miguel Estrada Portales. Trascurrido el término, sin personarse, el proceso penal iniciado en su contra, podría ser tramitado hasta la resolución definitiva que dicta fallo condenatorio.

¿Cómo llego un íntimo y protegido del mayor de los Castro, a manejar los negocios de un holding de empresas que mueve más de 100 millones de dólares anuales? ¿Por qué un amigo de la revolución por más 40 años, se convertiría en su adversario?

Aun hay muchas preguntas sin respuestas, algunas de ellas serán contestadas en el acto del juicio oral, donde el empresario chileno al parecer será juzgado en su ausencia y evidentemente tiene la llave de la caja de los secretos. Marambio de 63 años, un ex guardia personal del derrocado presidente Salvador Allende y ex amigo de Fidel Castro, es acusado por el gobierno cubano de los delitos de Cohecho, Actos en Perjuicio de la Actividad Económica o de la Contratación, Malversación, Falsificación de Documentos Bancarios y de Comercio, y Estafa.

El comerciante, propietario del International Network Group (ING), era socio del Estado cubano, en la empresa mixta "Alimentos Río Zaza" dedicada a la producción de jugos, lácteos y bebidas alcohólicas para el mercado cubano y extranjero. A finales de 2009, la Controladuría General, órgano estatal subordinado al Consejo de Estado, Presidido por el General de Ejercito Raúl Castro, comenzó a investigar los negocios del empresario izquierdista en la isla.

Extraoficialmente se le vinculó en un escándalo de corrupción que involucró al destituido director del Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba (IACC) y General de División Rogelio Acevedo. Max Marambio y su hermano Marcel, eran además socios del IACC, en la agencia turística Sol y Son. En la empresa fueron detenidos varios directivos acusados de pagar sobornos, malversar de fondos y desviar recursos al exterior. Lucy Leal, directora de ING, fue arrestada y es investigada.

Las autoridades no han declarado oficialmente nada al respecto al escándalo. En abril, sin embargo, reconocieron que las empresas de Marambio estaban bajo investigación, cuando apareció muerto en su departamento, uno de los gerentes de Alimentos Rio Zaza, el chileno Roberto Baudrand, de 59 años, detenido en su domicilio en Cuba y sometido a interrogatorio. La autopsia cubana, aceptada por la familia del fallecido, aseguro que la causa de muerte fue una insuficiencia respiratoria combinada con el consumo de fármacos y alcohol.

Marambio, conocido en Cuba como "El Guatón" (gordo), fue citado e interpelado, por el Instructor Estrada Portales, a finales de abril y principios de agosto. El oficial tiene a su cargo la investigación del caso. Los llamamientos se publicaron por medio de dos notas del MININT, en la Gaceta Oficial de la República de Cuba, órgano de divulgación de leyes y actos de gobierno en la Isla. Hasta hoy no se ha presentado.

La Citación fue publicada el pasado 19 de julio. En ella, el Instructor del MININT, llama al comerciante chileno para que comparezca ante él el día 29 previniéndole, que de no presentarse en la fecha indicada, se libraría una Requisitoria, que se libro el 3 de agosto. El oficial Estrada Portales ordenó, a los jefes de los cuerpos de policía y de seguridad del Estado, la búsqueda, captura y presentación de Marambio en un plazo de 20 días.

El llamamiento vence el próximo 23 de agosto. Transcurrido el plazo sin haber comparecido o sin haber sido presentado el ausente se le declara en rebeldía. El sistema judicial cubano prevé la continuidad de la tramitación del proceso contra el acusado declarado en rebeldía hasta su resolución definitiva, cuando se trate de delitos contra los intereses fundamentales, políticos o económicos, de la nación.

El sistema judicial en Cuba ofrece pocas garantías a los encausados. El proceso penal en su contra se encuentra en fase preparatoria, momento en que se realizan las diligencias previas a la apertura del juicio oral. Si Marambio regresa a la isla tiene grandes probabilidades de terminar en la cárcel, como medida cautelar para asegurarlo. Hasta que ese momento no llegue, tampoco puede nombrar un representante legal que interese su defensa.

Todo parece indicar que la vía legal será el medio para ajustarle las cuentas. La publicación de la citación y requisitoria, en la Gaceta Oficial de la República de Cuba, es un requisito formal. El gobierno de la isla no tiene la intención perseguir al empresario internacionalmente.

El propósito es declararlo en rebeldía y enjuiciarlo en ausencia. En ese caso se le designaría un abogado de oficio. Igualmente puede presentarse cuando quiera y dejar sin efecto tal declaración. Incluso, podría anular la sentencia firme dictada en su contra y ser oído en nuevo enjuiciamiento. Marambio pudiera se r una bomba de relojería para los hermanos Castro. Por lo que sabe y por lo que calla. Sospecho que no va a regresar.
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Escenario confuso.

Por Laritza Diversent.

Antes de constituirse el actual Consejo de Estado, el 25 de febrero de 2008, Fidel Castro renunció a los altos cargos de este órgano. En un mensaje público explicó que su estado de salud no le permitía ocupar "una responsabilidad que requiere movilidad y entrega total que no estaba en condiciones físicas de ofrecer".

A mediados de julio de 2010, después de varios meses de ausencia en los medios de comunicación oficial, apareció notablemente recuperado. Los comentarios no se hicieron esperar ¿Pretende recuperar sus cargos y volver al poder?

Se especula que intenta dar un "Golpe de estado de mano" a Raúl Castro, después de haberle cedido hace cuatro años, la dirección del país por motivos de salud. Su hermano menor le gurda respeto, demasiado para tratarse de un hombre que tiene la responsabilidad de dirigir una nación.

Tampoco dudo que extrañe su posición como el numero uno de la isla. Sin embargo, el tiempo no pasa por gusto. El escenario actual no permite retroceso. Cualquier acción puede ser arriesgada. Un 20 % de abstención en las urnas en las recientes elecciones, reafirma que el descontento popular se escapa del control.

Alguien me preguntó, si en la pasada sesión extraordinaria, la Asamblea Nacional podría acordar una nueva convocatoria para elecciones y colocar al mayor de los Castro a la cabeza del Estado. La idea desde el punto de vista legal parece descabellada.

Primero, falta una razón de peso que justifique un cambio en la dirección del país. Segundo, si el motivo aparece, reafirmarían las luchas por el poder. No obstante, en Cuba, todo puede suceder.

Es cierto, la figura del "compañero que reflexiona", levanta la interrogante sobre quién realmente gobierna y decide en el país. Sin embargo, su avejentada imagen y todo lo que implica -incoherencia y lagunas mentales- lo convierte en un inepto para la dirección. La percepción se generaliza. No creo que la mayoría de la población avale su regreso, aunque tampoco dudo que lo impongan.

No hay dudas, el mesías manda un mensaje solapado: "cuidado, aún estoy en juego". Intenta ganar espacio entre los jóvenes ambiciosos que quieren ganar la confianza y puesto en las altas esfera de poder. Sin embargo, sospecho que detrás de su figura, se esconden los intereses de otros personajes.

Claro que su repentina aparición, está relacionada con el inédito dialogo con la excarcelación de los prisioneros políticos de la "Primavera Negra" del 2003. Salta la duda si realmente el gobierno cubano emprenderá acciones concreta para mejorar la situación de los derechos humanos dentro de la isla, que merezcan un cambio de política por la Unión Europea y Washington. De paso, pone en tela de juicio la capacidad de Raúl para tomar decisiones y emprender cambios imprescindibles dentro del sistema.

Las pugnas por el poder no se ven pero se sienten. La actuación interna de los órganos represivos no siempre sigue la misma línea. Por una parte reprimen –detenciones arbitrarias e intimidaciones contra disidentes. Por otra, muestran una tolerancia que obliga a preguntar quién da las órdenes. El escenario es confuso.
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Julio Cortázar y el bloqueo.

“De la revolución ya hablaremos, hoy solo te digo una cosa: salvo cuatro o cinco escritores (Lydia Cabrera, Novás Calvo…) todos  los artistas e intelectuales están hasta el cuello con Fidel Castro, trabajando como locos, alfabetizando y dirigiendo teatro y saliendo al campo a conocer los problemas… Huelga decirte que me siento viejo, reseco… francés al lado de ellos… Pero volveré, ya no puedo salirme de mi cascarita (…) Qué tipos, che, qué pueblo increíble. El bloqueo es monstruoso. No hay remedios, ni siquiera una pastilla para la garganta.” (Julio Cortázar, 1963)
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jueves, 19 de agosto de 2010

Marambio: investigación complementaria.

Por Gustavo Silva.

Además de dos muertos hasta ahora, las vacaciones prolongadas a la fuerza del general de división Rogelio Acevedo, las medidas cautelares contra su esposa (Ofelia Liptack) y la "contadora" de Sol y Son (Lucy Leal), los enredos de Max "El Guatón" Marambio habrían desembocado en el proceso penal clásico también por la memoria afectiva de Castro.

Hacia 2007 una verificación fiscal (en el sentido de la fiscalía, no del fisco) puso ya de manifiesto serias irregularidades en la empresa mixta cubano-chilena Alimentos Río Zaza, pero el informe se engavetó. Era sabido que Marambio urdió el negocio redondo de utilizar otras empresas suyas como proveedoras de pulpas de fruta para elaborar jugos en las dos plantas fabriles de Río Zaza, con la justificación del incumplimiento de suministros por la empresa estatal cubana de cítricos Victoria de Girón y alegaciones de corte martiano, como "el mango de Cuba es demasiado agrio". De paso Marambio importaba mostos, con ventaja arancelaria, para embotellarlos dentro de la Isla con la etiqueta de vinos Nazareno. Sin embargo, esta y otras infracciones flagrante del "objeto social" de Río Zaza se pasaban por alto, hasta que Marambio tuvo la ocurrencia de respaldar al candidato Marco Enríquez-Ominami (Partido Progresista) en las elecciones presidenciales de Chile (diciembre 13, 2009). Este hijo del finado Miguel Enríquez, secretario general (1967-1974) del Movimientode Izquierda Revolucionaria (MIR), no vaciló en tachar al régimen castrista de "autoritario e intolerante". Al día siguiente de las elecciones, la Contraloría General de la República de Cuba irrumpió en Río Zaza. Traían como antecedente el informe de aquella verificación fiscal.

Otro recuerdo más lejano habría remachado el clavo policial de la citación pública de Marambio, en la mismísima Gaceta Oficial, para ser instruido de cargos por "cohecho, actos en perjuicio de la actividad económica o la contratación, malversación, falsificación de documentos bancarios y de comercio, y estafa". A la cabeza del Grupo de Amigos del Presidente, Marambio veló por la seguridad personal de Salvador Allende y combatió en La Moneda (septiembre 11, 1973), pero tras suicidarse Allende y emprenderse la retirada hacia la embajada cubana (con el propósito de seguir el plan de que los chilenos se alzaran en el campo con armas que serían descargadas de barco cubano, a la espera en puerto chileno), Marambio se apartó con el pretexto de que su compromiso era con el presidente Allende. Así se adelantó a Saramago. No sólo porque dijo entonces algo parecido a "Hasta aquí he llegado", sino también porque al cabo volvió al redil del castrismo. Aunque a diferencia de Saramago y muchos otros, "El Guatón" supo arreglárselas para hacer fortuna en Cuba.

Luego de apartarse Marambio, los cubanos se atrincheraron en la embajada y cuando los carabineros pensaban que iban a coger mangos bajitos, el fuego de respuesta hizo que el jefe actuante informara al mando golpista: "Esa gente que está disparando no son diplomáticos". A Castro deben haberle venido a la memoria los informes rendidos por oficiales cubanos de tropas especiales sobre las jornadas en La Moneda y la embajada de Castro en Chile, que incluyeron de seguro aquel incidente con Marambio y podrían desencadenar ahora un viejo "problema de principios".
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domingo, 8 de agosto de 2010

Quintín Banderas y la Guerrita de Agosto.

Por Dimas Castellanos.

Víctima del poder, de la violencia, de las injusticias sociales y del racismo, durante la llamada Guerrita de Agosto de 1906, generada por el conflicto entre la élite política de la época con motivo de la reelección presidencial de Tomás Estrada Palma, fue asesinado uno de los héroes de las gestas independentistas cubanas, el General del Ejército Libertador Quintín Banderas Betancourt; un negro liberto que entregó 30 años de su vida a la lucha por la abolición de la esclavitud y la independencia de Cuba.

Negro, de mediana estatura, fortaleza física, sonrisa fácil e inteligencia natural, Quintín formó su personalidad en el barrio santiaguero de Los Hoyos. Su labor como albañil desde temprana edad, le impidió aprender las primeras letras. Viajó a España como fogonero y grumete de un barco donde aprendió el oficio de marino mercante. Se incorporó como soldado a la Guerra de los Diez Años y terminó como General de División. Participó en la Invasión a Las Villas, en la Protesta de Baraguá, en la organización de la Guerra Chiquita, en la Guerra de Independencia de 1895 y en la invasión a Occidente en 1897. Fue juzgado y separado del servicio por un Consejo Militar, pero una vez finalizada la guerra, la Asamblea del Cerro ratificó sus grados de General de Brigada y de División con carácter retroactivo.

Sus indisciplinas, relacionadas con su carácter rebelde, se produjeron en un ambiente perneado de racismo e intrigas. Quintín, de piel bien negra, tuvo como jefes y subordinados a cubanos de piel blanca. Figuras del calibre de Calixto García, por ejemplo, condicionaron su participación en la guerra a que la jefatura estuviera en manos de blancos. Lo indiscutible es que el General Banderas fue uno de los cubanos que puso los intereses de la patria por encima de los personales. En una oportunidad escribió: Jamás pensé en los provechos que me proporcionaría la guerra, solo la libertad dirigió mis pasos, y, a su logro he consagrado mi juventud, mis comodidades, mi vida entera. El triste desenlace de su vida está relacionado con el racismo y la violencia en el escabroso proceso de conformación de nuestra nación.

Las naciones, resultado de procesos históricos complejos, alcanzan su plenitud en el momento en que la conciencia de identidad y pertenencia de diversas comunidades desemboca en una comunidad única y estable. En Cuba, ese proceso aún sin completarse, estaba en ciernes en los primeros años del siglo XX. Peninsulares y africanos, devenidos criollos y cubanos, aceleraron su identidad en el fragor de las guerras. Sin embargo las grandes diferencias sociales, económicas y culturales, de derechos y oportunidades, consolidadas durante varios siglos de esclavitud, impidieron la formación de un propósito común –aún no logrado– por encima de los elementos diferenciadores.

Una vez terminada la guerra, la igualdad entre cubanos, recogida formalmente en la Constitución de 1901 no se acompañó de medidas prácticas para disminuir la gran brecha entre negros y blancos. Por ejemplo en el artículo 13 rezaba: “…toda persona podrá aprender o enseñar libremente cualquiera ciencia, arte o profesión, y fundar y sostener establecimientos de educación y enseñanza…”, Sin embargo, en 1905 se continuaban haciendo gestiones para crear un centro encargado de la educación primaria superior y de segunda enseñanza para jóvenes negros que no contaban con recursos económicos para recibir tal enseñanza. Como resultado, los negros siguieron siendo lo que eran antes de las contiendas, sencillamente negros.

La doble discriminación que sufrían –como cubanos respecto a los peninsulares y como negros respecto a los blancos–, unido a sus desventajas económicas y culturales, se reflejó en la ocupación laboral. Los empleos en establecimientos comerciales, en las empresas norteamericanas (telégrafos, teléfonos, electricidad y centrales azucareros) y también en las oficinas públicas del Estado estaban prácticamente reservados para blancos, mientras los negros tenían que emplearse en la construcción, la agricultura y algunos otros oficios. La mejor evidencia de ello fue la conformación de las fuerzas armadas republicanas, donde los negros, que habían constituido el 60% de los combatientes del Ejército Libertador, en 1907 eran menos del 15% de los soldados y policías. Los negros pasaron de héroes en la guerra a desempleados en la República.

En tan desfavorable entorno, el General de las tres guerras dirigió cartas, solicitó entrevistas e intentó ocupar plazas vacantes sin resultados. El Nuevo Criollo del 25 de agosto de 1905, publicó como ejemplo de discriminación racial la negativa del presidente Estrada Palma a recibirlo. Obligado a trabajar unas veces de cartero y otras en una sección de recogida de basuras, logró sobrevivir gracias a los préstamos, las colectas y las funciones públicas que organizaban sus amigos. Para colmo, con la justificación de que había sido sancionado, se le negó la pensión de veterano; un argumento falso, pues como dijimos antes, la Asamblea del Cerro le reconoció sus grados de General con carácter retroactivo. Ante tan crítica situación optó por participar en la política. En 1899 acompañó a Juan Gualberto Gómez en el intento de organizar a los veteranos de la provincia oriental. Cerrados todos los caminos, en 1906 se unió a la llamada Revolución Liberal de Agosto con un pequeño grupo de hombres, en contra de la reelección de Don Tomás Estrada Palma.

En esa contienda fue el primero en iniciar las acciones combativas: asaltó el tren Habana-Guanajay, combatió y requisó armas y víveres en varios pueblos de La Habana. Una vez fracasado el intento armado, desde su campamento envió una carta a las autoridades solicitando salvoconducto para salir del país. La respuesta fue la orden de asesinato. Cuatro balazos y siete machetazos sellaron su vida. Según el parte forense falleció a consecuencias de traumatismos accidentales.

Lo único que hay es que entender –decía Juan Gualberto Gómez– es que sin libertad y sin igualdad no cabe que exista fraternidad. Y lo cierto es que en el momento del asesinato de Quintín, no existía vida económica, cultura, ni conciencia de destino comunes; elementos definitorios sin los cuales no se puede considerar que un conglomerado humano ha devenido nación. Y Fernando Ortiz afirmaba: Sin el negro Cuba no sería Cuba. No podía, pues, ser ignorado. Para mal de todos los cubanos, ese problema ignorado, aún no ha sido resuelto de forma definitiva.

Su ascenso a General fue un ejemplo de la participación de los negros en el Ejército libertador; su asesinato, un símbolo de las injusticias en la República. Después de muerto se le colocó en el panteón de los mártires y su figura fue manipulada por los partidos políticos de la época para atraerse el voto de los negros, que como sabemos, no eran pocos.
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jueves, 5 de agosto de 2010

Raúl, pequeñín, ¿dónde estás?

Por Alana.

Raúl, pequeñín, ¿dónde estás? ¿Qué te han hecho, pobrecito mío? Seguramente el malvado hermano mayor ha vuelto a castigarte encerrándote en el cuarto oscuro. Te has portado mal … es que no escarmientas hijo mío. ¿Cuántas veces tendré que decirte que no tomes decisiones sin antes consultar? Hay que respetar a los mayores, chavalín… faltaría más. Esta vez te han engatusado el Desatinos y el curita Ortega y ya ves tú las consecuencias. ¡Vuelta a sacar los pies del plato y vuelta al cuarto oscuro! Pobrecillo mi chinito… que cabezota es. Además, ¿qué prisa tienes en obtener protagonismo cuando sabes de sobra que al cantío de un gallo serás el dueño del patio? Pero tú, dale que te pego con tu impaciencia… Venga ricura, que tu momento está a la vuelta de la esquina y en breve podrás protagonizar cambios que seguramente no afectarán en lo más mínimo la integridad del régimen para que el castrismo sobreviva a Fidel presidido por el benjamín de la familia que también es castro. Entonces con o sin la ayuda de Desatinos y el curita Ortega harás "cosas" que contenten a los "comemierdas" de siempre que te arroparán diciendo que "algo está cambiando en Cuba" … (Otro perro con el mismo collar teñido de rojo con sangre inocente).

A lo mejor tú resultas ser un poquito menos malo que tu hermano Fidel, pues aunque sois hijos de la misma pobre madre emputecida, tu padre al menos no fue un gallego cuatrero sino un bonitillo y chulesco soldadito achinado (como tú) cuyo mayor defecto (o virtud) fue haber sido un consumado y empedernido fornicador lo cual despertó las ansias incontroladas de la enviciada autora de tus días. ¡No te aflijas, chiquilín! Aquí en España hay un dicho que dice: "La jodienda no tiene enmienda" … Eso pasa en las mejores familias; cuanto más en la tuya que no ha sido de lo mejor … ni mucho menos. Hazme caso, pedazo de cielo, por una vez y pórtate bien para que te saquen del cuarto oscuro y cuando menos te dejen "echar" un discursito en una cooperativa agraria en algún lugar remoto de la isla. Sé paciente que estas en el umbral de la gloria terrenal. No bebas mucho, sobre todo si conduces; el alcohol y el asfalto son incompatibles. Recibe un fuerte ¡ojalá que te parta un rayo! Y hasta la próxima … Raulillo, pequeñín …
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Operación Tocoro (la anexión de Cuba a Estados Unidos).

Toda persona medianamente informada en Historia de Cuba sabe que el apetito norteamericano por Cuba viene de lejos. Benjamín Franklin ya recomendaba a Inglaterra en la época de las trece colonias la toma de la isla de Cuba. En 1783 John Adams propuganaba la anexión de Cuba y Puerto Rico. El objetivo estratégico de Estados unidos se expresó en la opción anexionista de la compra a España de cuba y de prolongar el débil dominio español para aspirar a la intervención después. En 1805 el presidente de Estados unidos Thomas Jefferson expresó a Gran Gretaña que en caso de guerra con España, los EE UU se apoderarían de cuba. En 1823 John Quincy Adams formuló la tesis de la "fruta madura" segun la cual Cuba por su cercanía geográfica debía caer en manos de los EE UU. El presidente James Monroe para referirse a Cuba afirmaba "agregar Cuba era lo que necesitaban los Estados Unidos, para que la nación americana alcanzara el mayor grado de interés ... Siempre la miré como la adquisición más interesante para nuestro sistemade estado".

El 28 de abril del propio año 1823, John Quincy Adams, a la sazón Secretario de Estado, escribe que "hay leyes de gravitación política, como leyes de gravitación y de la física. Cuba, separada de España, tiene que gravitar hacia la Unión, y la Unión, en virtud de la propia ley, no iba a dejar de admitirla en su propio seno. No hay territorio extranjero que pueda compararse para los Estados Unidos como la Isla de Cuba. Esas islas de Cuba y Puerto Rico, por su posición local, son apéndices del Continente Americano, y una de ellas, Cuba, casi a la vista de nuestras costas, ha venido a ser de trascendental importancia para los intereses políticos y comerciales de nuestra Unión".

En 1848, el presidente Polk trata de comprar Cuba a España por 100 millones de dólares de la época. Intentos similares harían en 1853 y 1861 los presidentes Pierce y Buchanan. En 1869, terminada la Guerra de Secesión y cuando ya ha comenzado en Cuba la primera Guerra de Independencia ("Guerra de los 10 Años"), el presidente Ulysses Grant hace un nuevo intento de adquirir la Isla mediante compra. Y en fecha tan cercana a la intervención estadounidense como 1897, cuando los cubanos se enfrentaban victoriosamente a los españoles, el presidente William McKinley hizo un nuevo intento de comprar a Cuba a través de su embajador Woodford. Incluso la Isla de Pinos no fué reconocida dentro de las fronteras de Cuba hasta 1925. Todo esto me lleva a pensar que tal vez la supervivencia de la revolución sea parte de un maquiavélico plan para "madurar" las condiciones que propicien una anexión de Cuba a Estados Unidos. El éxito de los lobbystas cubanos en Estados Unidos, entre ellos Estrada Palma desbarató los planes anexionistas y EE UU no tuvo mas remedio que conceder la Independencia. Luego la derogación de la enmienda Platt ante el creciente nacionalismo de los cubanos. Cuba se le escapaba de las manos ... adios al sueño anexionista hasta que llegó la revolución. Y aquí surge mi pregunta ¿No estarán los EE UU apoyando la subsistencia del régimen para que la destrucción de Cuba sea tan grande que una vez haya caido el régimen los cubanos se lancen en brazos del "antiguo enemigo" ¿Por qué EE UU no invadió Cuba con cualquier pretexto cuando cayó la URSS y en Rusia gobernaba un inepto Boris Yelsin? El momento perfecto. Con apagones de 10 horas y una economía arruinada era el momento ideal. Pero no intervinieron. ¿Por qué? Con más de 1 millón y medio de cubanoamericanos viviendo en EE UU no sería difícil cuando llegue el momento una reunificación de las dos orillas. El plan perfecto. Responda "Sí (YES)" o "No (NOT)" a la pregunta "¿desea usted estar bajo la protección de la ciudadanía norteamericana que en un futuro le protegerá de dictadores caudillistas como Fidel y Batista?" Tómese su tiempo ... hemos esperado dos siglos ... así que podemos esperar el tiempo que usted quiera.
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Un eco del Maleconazo en Pinar del Río,

Por Pedro P. Arencibia Cardoso.

En el año 1994, en la Iglesia de la Caridad de la ciudad de Pinar del Río y después de finalizada la Misa del 8 de septiembre con el canto final Virgen Mambisa, se empezó a alabar a la Virgen de la Caridad con los versos del estribillo de la canción"Veneración" de Rafael Cueto, el integrante del famoso Trío Matamoros: "Y si vas al Cobre / quiero que me traigas / una Virgencita de la Caridad./ Yo no quiero estampas/ Yo no quiero flores / lo que quiero es Virgen de la Caridad." Pero el canto rápidamente y de manera espontánea, y siempre acompañado por instrumentos musicales, fue cambiado por: "Yo no quiero estampas / Yo no quiero flores / Lo que quiero es Cuba / ¡LIBRE DE VERDAD! "

Ese canto que comenzó frente al altar de la Virgen con unos pocos cantantes, se extendió a numerosos fieles por todo el concurrido templo y llegó, acompañado de algunos instrumentos, hasta la acera de la calle San Juan frente al templo. Después de terminar de cantar esos versos comenzamos a gritar "¡LIBERTAD!, ¡LIBERTAD!, ¡LIBERTAD!", ya que estaban reciente los sucesos de la masiva protesta popular conocida como "El Maleconazo" del 5 de agosto de 1994.

La Brigada de Respuesta Rápida, porra Castrista paramilitar dirigida por un entonces mayor de la Seguridad del Estado, que todos los años vigila la Misa desde la acera oeste de la calle San Juan, más algunos colaboradores y Personal de Confianza de la Seguridad del Estado que "participaban" encubiertos dentro del templo, no sabían que hacer y se mostraban desconcertados ante la situación y caminaban apurados y corrían de una parte para otra con miradas nerviosas a los jefes de  '¿Qué hacemos?', pero los jefes no estaban menos desconcertados que los subordinados.

Nos cansamos de cantar y de gritar, y con la autoestima alta y más felices que nunca, aunque con temor, nos fuimos en grupos para nuestras casas con la satisfacción de que durante 15 o 20 minutos nos comportamos como hombres y mujeres libres, fieles seguidores de la Virgen Mambisa.
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El maleconazo del 5 de agosto de 1994.

Por Aleaga Pesant.

Sonó el despertador. A los treinta años, era el verano más sofocante que recordaba. Toda la noche hubo apagón en Alamar y la mañana no resultaba más fresca. Se fijo en el calendario. Viernes cinco de agosto de 1994.

Los recién inventados camellos eran arrastrados por los lentos capetrés (camiones rusos), por lo que decidió coger una botella con un amigo, para salir de la ciudad dormitorio. No tenía el día para montar bicicleta. En la ciudad fue directo al cliente del día, la extra hotelera Occidental Gaviota, en calle 16, Miramar. Tenía reunión a las diez de la mañana con el ejecutivo principal.

Mientras esperaba en el recibidor de la antigua casa vivienda convertida en oficinas, escuchó a un funcionario comentar que "iba a ensillarse" (colocar la pistola en el cinto) "porque a mí no me van a coger de jamón". Percibió nuevamente la alarma en el ambiente y recordó los días anteriores.

Recordó el periodo especial con su secuela de miserias. Luego los sucesos de Cojímar, cuando los guardafronteras ametrallaron en el muelle a un grupo de personas que huían del país, y una tarde de procesión en Regla donde los manifestantes, que cargaban el cadáver de otra víctima del régimen, gritaban asesinos a los policías.

Luego pensó en el hundimiento del remolcador 13 de marzo, el 13 de julio, y a renglón seguido en el segundo intento de secuestro de la lanchita Baraguá, de Casablanca.

Después de la reunión con el militar-empresario se dirigió a su oficina, donde sería recogido a la una de la tarde para visitar las instalaciones del Parque Morro-Cabaña, en especial el restaurante ubicado en la Batería de los Doce Apóstoles, al otro lado de la bahía.

No había electricidad en la ciudad, ni transporte para salir de ella. La televisión sólo trasmitía en horas de la noche. Casi todos los centros de trabajo estaban cerrados. El vagabundeo se había apropiado de la ciudad sin alimentos, cansada de promesas incumplidas y con la curiosidad de lo que sucedería con la lancha Baraguá llena de fugitivos, que continuaba detenida en medio de la bahía. Corrían rumores: se preparaba un barco para sacar a los que quisieran rumbo a Estados Unidos.

El auto demoró casi veinte minutos en recorrer los 1500 metros entre Belascoaín y la entrada del túnel de la bahía. Negros, mulatos y blancos paseaban por el malecón sin respetar el sol de agosto, ni los pocos y viejos autos que en el verano de 1994 circulaban por la avenida. Sólo paseaban, con la expectativa puesta en lo que ocurriría con la lanchita de Casablanca.

En el restaurante Batería de los Doce Apóstoles, allende al canal del puerto, es de donde se ve hermosa la ciudad, el equipo de trabajo se sentó a disfrutar del mojito, mientras discutía de publicidad. Sin embargo, la tensión exterior fue atrapando a los presentes. Delante de ellos cientos habaneros, concentrados en la Avenida del Puerto, corrían de un lado a otro. Trescientos metros de mar los separaban de las multitudes que corrían, cuando vieron aparecer los policías.

La gravedad de los sucesos dio por terminado el encuentro de negocios antes de lo previsto. Pasadas las 4 de la tarde subieron al auto para cruzar el túnel. La imagen de la ciudad era la de un campo de batalla. Un grupo de personas apedreaban un auto patrulla, mientras los oficiales trataban de esconderse en el interior. Las personas corrían de un lado a otro sin orden, sólo con el terror y la euforia retratados en los rostros.

El funcionario que iba "ensillado", dijo:

-¡Hay que sacar los tanques!

El auto se movió rápidamente hacia la calle 23 donde, agrupados en bloques compactos, se encontraban hombres y mujeres de pulóveres blancos que llevaban una inscripción sobre el pecho: Contingente Blas Roca. En sus manos llevaban palos, machetes, cabillas. La porra "del proletariado" esperaba la orden de avanzar sobre la ciudad, escoltada por las tropas de asalto de las Fuerzas Armadas Revolucionarias.

El auto siguió por la calle O y dobló por 19 hasta detenerse en el lugar de donde había partido. Eran las cinco de la tarde del viernes cinco de agosto de 1994.

Esa noche, a las nueve, al teatro Carlos Marx no le cabía un alpiste. Carlos Varela, con el sombrero calado hasta los ojos, cantaba: Guillermo Tell no comprendió a su hijo, que un día se aburrió de la manzana en la cabeza/ echo a correr y el padre lo maldijo entonces como iba a probar su destreza.
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1956, Castro en miniatura.

Por Sergio López.

"Me convencí de que no estaban creadas las condiciones para la insurrección", fueron las palabras de Jesús Montané al rendirse a las autoridades de Niquero tras la fracasada expedición del Granma. Quien había acompañado a Fidel Castro desde la preparación de las acciones violentas del 26 de julio de 1953, coincidía en esos momentos con Frank País, que a pesar de organizar los disturbios del 30 de noviembre en Santiago de Cuba, durante el año 1956 había tratado un par de veces de convencer a Castro en México de sus pocas probabilidades de éxito.

Traducido a los códigos de la hegemonía política, en lo que Jesús Montané y Frank País estaban de acuerdo, era en la debilidad del grupo político liderado por Fidel Castro y, por lo tanto, en su escasa capacidad de llegar a la opinión pública, mediante esa mezcla de sanción y persuasión que desde siempre ha señoreado en el mundo revolucionario.

No olvidar que de los 89 que sobrevivieron a los sucesos del 26 de julio de 1953, sólo 19 integraron la expedición del 2 de diciembre de 1956. Y que muchos de los expedicionarios, luego de aquella fecha tomaron distancia del Movimiento Revolucionario 26 de Julio. Saber que 17, 36 y 146, son las cifras más conocidas de la cantidad de alistados en la Sierra Maestra durante el año 1957, nos ayuda a entender mejor este fenómeno histórico. Pero, claro, eso merece un análisis más general, que integre un mayor número de variables.
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martes, 3 de agosto de 2010

Estrada Palma y la reelección.

Por Dimas Castellanos.

El estado actual de Cuba confirma la imposibilidad del progreso social sin la participación cívica de los ciudadanos. La crisis estructural en que estamos inmersos y los obstáculos para salir de ella, guardan una estrecha relación con la ausencia de la participación popular en calidad de sujeto de la historia. Una realidad agravada por el hecho de que nuestro país, en materia de libertades, ha retrocedido hasta el punto en que se encontraba en 1878. Por ello, tan ineludibles son los cambios en la economía como en materia de derechos humanos para propiciar la participación ciudadana, desde la sociedad civil, en las decisiones de la nación.

La importancia de la política –ámbito de la realidad social referido a los problemas del poder– radica en que la misma constituye un vehículo para transitar de lo deseado a lo posible y de lo posible a lo real; una esfera que implica tanto al Estado como a la sociedad. Los intentos de progreso que ignoren esa verdad, como ha ocurrido hasta ahora, resultan ilusorios.

La relación entre lo que ahora mismo está ocurriendo en nuestro país con la reaparición pública del ex-jefe del Estado cubano –fenómeno insostenible en el corto plazo por la ingobernabilidad que genera– tiene como denominador común con épocas anteriores la ausencia del cubano como sujeto de la historia. Para demostrar esa continuidad, en esta oportunidad me detendré en el primer intento de reelección presidencial en Cuba.

La Constitución de 1901, en su artículo 96, referido al período de duración del mandato presidencial, dice que el cargo durará cuatro años; y nadie podrá ser Presidente en tres períodos consecutivos. Por tanto el conflicto alrededor del intento de reelección en 1906 no radica en la ilegalidad, sino en otra parte.

Tomás Estrada Palma (1835-1908), se incorporó la Guerra de los Diez Años desde su inicio, en la que obtuvo el grado de General. En el Gobierno de la República en Armas, ocupó los cargos de Secretario de Guerra, de Relaciones Exteriores y de Presidente. En 1877 fue hecho prisionero y liberado después de la Paz de Zanjón. Emigró a Estados Unidos, donde fundó una escuela para latinoamericanos. En 1895, fue designado ministro plenipotenciario del gobierno provisional de la República de Cuba en Estados Unidos y fue el centro de la Junta Revolucionaria de Nueva York. En 1901 fue elegido presidente de la República de Cuba.

Estrada Palma se concentró en una empresa importante, la austeridad en el manejo de los bienes públicos. Sin embargo, aunque consideraba que el pueblo carecía de formación para vivir en libertad, no se empeñó en el fortalecimiento de los espacios e instituciones para lograrlo. Esa decisión, consciente o no, constituye una manifestación de mesianismo, una esperanza infundada en la capacidad de un ser terrenal para conducir a un pueblo a la salvación. En ausencia del pueblo, su administración quedó limitada a una élite política carente de cultura cívica. Por ejemplo, la promulgación de leyes se hizo muy difícil, ya que para su aprobación se requería la presencia de las dos terceras de los congresistas, cuya asistencia al no ser obligatoria era aprovechada por los partidos políticos (Liberal y Moderado) para entorpecer la labor legislativa en su lucha por el predominio en el Congreso. En esa situación, el presidente Estrada Palma, que había rehusado afiliarse a ninguno de los partidos existentes, decidió integrarse al Partido Moderado, para tratar, junto a la labor del Poder Ejecutivo, de obtener el quórum y promulgar las leyes y medidas necesarias.

En cuanto al tema de la reelección, Estrada Palma creó el Gabinete de Combate para garantizar el triunfo y obtener la mayoría en el Senado y la Cámara; empeño en el que utilizó toda la fuerza gubernamental, incluyendo el uso de la violencia y del fraude en perjuicio del Partido Liberal, el cual respondió con la abstención, y en consonancia con nuestra cultura de intransigencia y machete por medio, se alzó en armas. Proceso que ocasionó cuantiosos daños materiales y pérdidas de vidas humanas antes y durante el conflicto; entre ellas los asesinatos del coronel Enrique Villuendas en Cienfuegos y del General Quintín Banderas en La Habana, de quien me ocuparé en el próximo artículo.

Los alzados, en un manifiesto fechado el 1 de septiembre de 1906, proponían, entre otros puntos, el cese de las hostilidades, el restablecimiento de la paz, la libertad para los detenidos o procesados por actividades relacionadas con las elecciones y declarar vacantes los cargos de presidente y vicepresidente de la república, gobernador civil y consejero provincial, cubiertos en el último período electoral. Por su parte Estrada Palma exigía que primero depusieran las armas para después conversar. La intransigencia de las partes y en consecuencia el fracaso de la mediación de un grupo de veteranos, entre los que estaban los generales Bartolomé Masó, Mario García Menocal y Agustín Cebreco, que planteaban convalidar el cargo de Presidente y anular los del resto de los funcionarios electos.

La intransigencia condujo al desenlace. Entre el 8 y el 12 de septiembre, Estrada Palma suspendió las garantías, solicitó el envío de buques de guerra y la intervención; petición que el propio presidente norteamericano consideró inoportuna. Según Hortensia Pichardo, Teodoro Roossevelt agotó todos los medios que estuvieron su alcance para evitar ese paso. Entre esos medios cita la carta a Gonzalo de Quesada, de 14 de septiembre de 1906 y el telegrama a Estrada Palma, de 25 del propio mes. En la primera, Roosevelt expone, entre otros argumentos, que:

Nuestra intervención en los asuntos cubanos se realizará únicamente si demuestra Cuba que ha caído en el hábito insurreccional y que carece del necesario dominio sobre ella misma para realizar pacíficamente el gobierno propio, así como que sus facciones rivales la han sumido en la anarquía.

En Carta a su amigo Teodoro Pérez Tamayo, fechada el 10 de octubre de 1906, Estrada Palma expone que la solución mediante el pacto con los rebeldes era lo peor en que pudiera pensarse, pues los problemas secundarios que se originarían después serían tantos y tan difíciles de resolver, debilitada, si no perdida, la fuerza moral del poder legítimo y sin otra autoridad que dirimiese las diferencias, serían tantos y tan difíciles, repito, esos problemas, que darían lugar a que el país se mantuviera muchos meses en medio de una constante agitación, de efectos tan perniciosos como los de la guerra misma. Por eso, dice, resolvió de manera irrevocable, renunciar a la Presidencia, abandonar por completo la vida pública y buscar en el seno de la familia un refugio seguro contra tantas decepciones. Su último sacrificio, según sus palabras, era imposibilitar que el Gobierno quedará en manos criminales. Decisión que lo llevó a poner en conocimiento del Gobierno de Washington:

la verdadera situación del país, y la falta de medios de mi Gobierno para dar protección a la propiedad, considerando que había llegado el caso de que los Estados Unidos hicieran uso del derecho que les otorga la Enmienda Platt. Así lo hice…

Por esas razones, el día 28 de septiembre, junto al Vicepresidente y los secretarios de despacho, presentó su renuncia al Congreso y el país quedó bajo un Gobierno Provisional, encabezado por el Secretario de Guerra de los Estados Unidos, William H. Taft, con lo que se consumaba la segunda intervención norteamericana en Cuba.

La carencia de cultura cívica, la ausencia ciudadana en las decisiones de los destinos de la nación, la tendencia a las soluciones violentas y el mesianismo, se manifestaron en el quehacer de la élite política cubana. Un retrato que adelantó magistralmente Carlos Loveira en su república de “Generales y Doctores”.

Según sentenció Hortensia Pichardo, La primera república cubana había muerto a manos de sus propios hijos. Yo diría más bien que a manos de un puñado de sus hijos, porque la gran mayoría, como en el resto de los acontecimientos políticos, estuvo ausente de esas decisiones. La enseñanza de ese episodio de nuestra historia, y de otros que trataremos, indica que la preparación para la participación política es un camino largo y difícil, pero mucho más seguro que el que hemos transitado hasta hoy, donde muy poco tiene que ver la mayoría de los cubanos con lo que está ocurriendo.
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lunes, 2 de agosto de 2010

La verdad sobre los espías de la red avispa.

El 12 de septiembre de 1998 el FBI presentó ante la Corte Federal de Miami una denuncia criminal contra 12 (doce) cubanos comunistas residentes en Miami-Dade, acusándolos de pertenecer a una red de espionaje, bautizada como "La Red Avispa" y cuyos nombres eran: Manuel Viramontes, Luis Medina, Ruben Campa, René González, Alejandro Alonso, Antonio Guerrero, Lino Hernández, Linda Hernández, Joseph Santos y Amarilys Silverio, que se encontraban arrestados, y Ricardo Virrareal y Remigio Luna, que se daban como prófugos.

De acuerdo con los expresado en la denuncia, el FBI, desde 1995, conocía la existencia de la "Red Avispa", porque con autorización de una Corte, sus agentes habían subrepticiamente penetrado en la residencia de Viramontes, y allí habían escondido un sistema electrónico de contraespionaje que les permitió grabar conversaciones personales y telefónicas entre Viramontes y sus complotados.

A la pregunta reporteril de que por qué habían demorado tres años en detenerlos, se les respondió que durante todo ese tiempo los espías habían estado bajo estrecha supervisión y sin saberlo habían dado valiosa información y que tenían planeado abandonar el país prontamente.

La denuncia relata la relación de mando dentro de la "Red Avispa" y los objetivos asignados a sus miembros: Manuel Viramontes, "Giro" o "Giraldo", recibía instrucciones de Cuba ordenándoles asignar a sus agentes labores tales como la infiltración del Centro del Comando Sur de Estados Unidos, en Miami, tácticas para desorganizar a las organizaciones de exiliados y desacreditar a sus líderes, actividades informativas de la Estación Aero Naval de Boca Chica, y desinformación de la opinión pública, manipulando los medios de prensa y el teléfono; e implantar medidas de seguridad que impidieran la detección de la Red.

Luis Medina "Allan" fue transferido de Tampa a Miami, para infiltrarse en el Comando Sur y en Boca Chica. Rubén Campa "Vicky", sustituir a Viramontes y Medina, cuando estos viajaran a Cuba a recibir instrucciones. René González, "Castor" e "Iselin", infiltrarse en Hermanos al Rescate y hacerse pasar como informante del FBI. Alejandro Alonso "Franklyn", infiltrarse en el Movimiento Democracia y participar en sus flotillas como navegante. Antonio Guerrero, "Lorient", infiltrarse en la Estación Naval de Boca Chica, en Key West y reportar las actividades diarias logísticas de aviones, diseños de edificios y hangares y localización de las residencias del personal de confianza allí destacado. Lino Hernández "Manolo" y su esposa Linda Hernández "Judith", infiltrarse, respectivamente en CAMACOL y Alfa 66. Joseph Santos "Mario" y su esposa Amarilys Silverio, "Julia" infiltrarse en el Comando Sur.

Los fugitivos Ricardo Villareal "Horacio" y Remigio Luna "Marcelino" fueron identificados como supervisores ayudantes de Viramontes.

Entre las pruebas presentadas en mayo de 1999 ante un Gran Jurado Federal, que dictó un encausamiento por el derribo de las avionetas de Hermanos Al Rescate, estaba la que demostró que el 29 de enero de 1996 la Dirección General de Inteligencia de Cuba (DGI), bajo el mando del general de División Jesús Cutiño Bermúdez, puso en acción un plan denominado "Operación Escorpión", destinado a confrontar a los Hermanos al Rescate en un ataque aéreo a sus desarmadas avionetas. El siguiente mes de febrero, la DGI, ordenó a Manuel Viramontes, cuyo verdadero nombre es Gerardo Hernández y a un espía prófugo, Alberto Ruíz, que comisionaran a los desertores Juan Pablo Roque y René González, que se hallaban infiltrado en HAR y a los también prófugos Ricardo Villareal y Remigio Luna a que informaran la fecha apropiada y el plan de vuelo de una escuadrilla de HAR, para destruirla con la excusa de violación del espacio aéreo cubano, con "fines terroristas".

El 17 de febrero la DGI, instruyó a Juan Pablo Roque "Germán" y a René González "Castor" que no debían volar con los HAR entre los días 17 al 24 de ese mes.

Esta es la verdadera historia de la "Red Avispa", comprobada por los documentos de la Corte. No la falsa que cuentan la prensa amordazada de Cuba y sus esbirros aquí. De ahora en adelante cuando vea la cuantiosa propaganda que se está realizando a favor de los 5 espías que aún permanecen en la cárcel, le recomendamos que copien la información de arriba y se la envIen a los mentirosos de la internet.

¿Por qué no hablan de los otros integrantes de la Red, que cooperaron con las Autoridades norteamericanos? ¿Es que infiltrar y espiar al Comando sur de Los EE.UU. y la importante base areo-naval de Boca Chica, es "actuar en contra de los contrarrevolucionarios cubanos, para proteger a nuestro pueblo del terrorismo"?

¿Por qué la prensa amordazada, la televisión y la radio castrista, jamás han mencionado a los otros integrantes de la Red Avispa?

Como en todo, quieren mantener a nuestro pueblo casado con la mentira.

NOTA: En las actas originales de la primera acusación, algunos de los espías son nombrados por los nombres falsos que usaban mientras realizaban sus actividades de espionaje en contra de este país, la libertad y la democracia.
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